He tenido la fortuna de ser estudiante de Max, que sin duda alguna es un profesor de francés excepcional. Sus habilidades pedagógicas hacen que el aprendizaje del idioma sea claro y fácil de entender, además que se adapta perfectamente a las necesidades individuales de los estudiantes. Lo que destaca aún más es su cercanía y genuina preocupación por el progreso de cada estudiante, creando un ambiente de aprendizaje familiar y agradable, lo que te hace ansiar tener la siguiente clase. En tan solo un par de meses me ayudó a pasar de un conocimiento bastante básico a lograr recorrer Francia sin miedo a que el idioma fuera una barrera. Estoy agradecido por la experiencia de aprender con él y lo recomendaría sin dudarlo a cualquiera que busque aprender francés.