ser formado en el desarrollo de diferentes competencias. Aprender a hacer, aprender a conocer, aprender a convivir y aprender a ser. De esta manera permite una mejor preparación en la forma de cómo los estudiantes enfrentan la vida real. Esto implica una transformación en las formas de educar,
en la forma de cómo se enseña así lograr un verdadero análisis del presente y futuro de los estudiantes....
ser formado en el desarrollo de diferentes competencias. Aprender a hacer, aprender a conocer, aprender a convivir y aprender a ser. De esta manera permite una mejor preparación en la forma de cómo los estudiantes enfrentan la vida real. Esto implica una transformación en las formas de educar,
en la forma de cómo se enseña así lograr un verdadero análisis del presente y futuro de los estudiantes. Uno de los objetivos principales de cada una de las instituciones es el de formar, pero no formar personas que repiten lo que otros han hecho, sino el de formar seres
capaces de crear, inventar, descubrir y transformar.Una de las formas en la cual el alumno, estudiante, puede desenvolverse en este mundo de la información, es a través de la transversalidad del pensamiento crítico. Es aquí donde implicar al alumno, a la persona en cuestionar y razonar, en reflexionar acerca de lo que es, en lo que puede estar, en lo que debe ser, en lo que puede lograr así una transformación y restructuración social de uno mismo.
El pensamiento crítico se percibe como una capacidad cognitiva que permite transmitir significado para dispersar ideas, capacitando a las personas para un diálogo significativo con los demás y para experimentar sentimientos satisfactorios, tanto en su vida personal como social. Este mecanismo permite un mejor ajuste al medio que lo rodea, siendo de gran utilidad en contextos escolares y laborales, pues en ambos casos se requiere capacidad para dar una respuesta rápida y eficiente a los más variados desafíos.