Cuando yo era pequeño solo debía obedecer lo que mis padres decían, sin opinar porque de lo contrario recibiría un castigo, así que a mis hijos los enseñaré igual, eso les ayudará a formar el carácter.
Repetir nuestro estilo de crianza es un patrón común, los padres se forman sus criterios en base a lo que les enseñaron a ellos cuando eran niños. Sin embargo es necesario reflexionar acerca de las cosas buenas y no tan buenas que experimentamos, con el fin de hacer los ajustes requeridos en pro de nuestros hijos.
Existen tres estilos de crianza básicos:
· Autoritario: en el cual los padres controlan, dirigen y ejercen el dominio total de la situación familiar, los hijos deben seguir todas las órdenes y cumplirlas al pie de la letra.
· Permisivo: en contraposición al estilo anterior, los hijos son los que tienen el control y establecen las normas.
· Democrático: supone un estilo de crianza basado en un equilibrio entre lo establecido por los padres y lo que los hijos pueden opinar en un momento dado.
Posiblemente seleccionar la manera adecuada de criar a los hijos requiera de unos padres maduros, capaces de establecer límites y enseñanzas para la vida con valores basados en el respeto, el amor, la tolerancia, entre otros.
Promover la salud emocional de tus hijos está en tus manos, sana tus heridas del pasado para no repetirlas en ellos. Cada día tienes una maravillosa oportunidad para elegir cómo es tu conducta, recuerda que eres el modelo a seguir por ellos.